25 puntos para entender el propósito del estómago.
Los siguientes discursos científicos son 25 puntos importantes para entender el verdadero propósito del estomago, su fisiología y la digestión, la creación de bicarbonato sódico (NaHCO3) y ácido clorhídrico (HCL) en el revestimiento estomacal, la ingesta de proteínas, lácteos, queso y azúcar en cualquiera de sus formas y cómo la bioquímica, fisiología y anatomía ácida/alcalina están relacionadas con la salud, la enfermedad y el malestar en general.
Desafortunadamente, los médicos y científicos contemporáneos, al igual muchos de los profesionales de las llamadas medicinas alternativas y gente profana, NO entienden realmente como se genera el ácido/base en el cuerpo y como se inicia la acidosis latente tisular en el tejido conectivo coloidal. Bienvenidos al siglo XXI y a la “Nueva Biología” del Dr. Young.
¿Cómo se genera el ácido/base en el cuerpo?
Las células parietales o de revestimiento del estómago separan el cloruro sódico de la sangre. El sodio se une al agua y al dióxido de carbono para formar la sal alcalina bicarbonato sódico o NaHCO3. La bioquímica es: H2O + CO2 + NaCl = NaHCO3 + HCL. Esta es la razón por la que llamo al estómago un órgano alcalinizante y NO un órgano digestivo. El estómago NO digiere los alimentos o líquidos ingeridos, sino que alcaliniza los alimentos y líquidos que ingieres.
Por cada molécula de bicarbonato sódico (NaHCO3) generado, se segrega y secreta una molécula de ácido clorhídrico (HCL) en el llamado sistema digestivo – específicamente en el estómago (en el epitelio glandular del estómago, folículos gástricos de Frey) – para ser eliminado. Por lo tanto, el HCL es una sustancia ácida, producto de desecho del bicarbonato sódico que el estómago ha segregado para alcalinizar los alimentos y líquidos que se han ingerido.
El ión de cloruro proveniente del cloruro sódico (sal) se une a un ácido o generador protónico. El HCL tiene un pH del 1 y es altamente tóxico para el cuerpo y es causa de indigestión, reflujo ácido, úlceras y cáncer.
Cuando entran grandes cantidades de ácido al estómago – incluyendo HCL- provenientes de proteínas ricas de origen animal como productos lácteos; queso, leche o la carne, se retiran ácidos de los depósitos ácido/base del cuerpo. El organismo perecería si la alcalosis resultante – o el NaHCO3 o base sobrante – generada por el estómago no fuese captada por las glándulas alcalinizantes que necesitan estas bases rápidamente para poder generar sus potentes secreciones de bicarbonato sódico. Estas glándulas y órganos son el estómago, páncreas, glándulas de Brunner (entre el píloro y las uniones de los conductos biliares y pancreáticos), las glándulas de Lieberkunh en el hígado y la bilis con su poderosa capacidad para fijar ácidos, y que es liberada cuando hay presencia de alimentos altamente acidificantes como la carne o el queso para amortiguar los fuertes ácidos como el ácido nítrico, ácido sulfúrico, ácido fosfórico, ácido úrico y ácido láctico.
Cuando se ingieren productos de origen animal ricos en proteínas, el estómago comienza a fabricar y segregar bicarbonato sódico (NHCO3) para alcalinizar los ácidos provenientes de los alimentos ingeridos. Esto ocasiona una pérdida de las reservas alcalinas y un aumento de ácido o HCL que se encuentra en las foveolas gástricas del estómago. Estos ácidos y/o el HCL son captados por la sangre provocando una disminución del pH en plasma sanguíneo. La sangre elimina este aumento de ácido gastrointestinal vertiéndolo en los espacios de Pishinger.
El espacio contenido por estas fibras tan finas se llama el espacio de Pishinger o el espacio extracelular que contiene los fluidos que bañan y nutren a cada una de las células a la vez que arrastra los deshechos ácidos de las mismas. Este órgano no se menciona para nada en los libros de texto de fisiología americanos. Se menciona un espacio extracelular, pero no se habla de ningún órgano que almacene ácidos provenientes del metabolismo y de la dieta, como los riñones. Yo a este órgano lo llamo el “pre riñon” porque almacena ácidos gastrointestinales y metabólicos hasta que puedan ser neutralizados y eliminados a través de la piel, el tracto urinario y los intestinos.
Después de haber ingerido una comida rica en proteínas de origen animal provenientes de productos cárnicos o lácteos, el pH de la orina se vuelve alcalina. La ingesta de carne o queso provoca por un lado una reacción de tipo ácido en el organismo al producir respectivamente ácidos como el ácido sulfúrico, ácido fosfórico, ácido nítrico, ácido úrico, ácido láctico, ácido acetilaldeido y ácido etanol, y por otro lado, también, la formación y excreción de sustancias base en la orina. Por lo tanto, comer carne y queso genera una doble perdida de bases, que a su vez, conduce a una acidosis tisular y finalmente a la enfermedad, especialmente enfermedades degenerativas e inflamatorias.
Si durante el ejercicio físico intenso el ácido láctico no fuese absorbido por las fibras de colágeno captadores específicos de ácido del cuerpo, el organismo perecería. El conjunto total de estas fibras es el órgano más grande del cuerpo y se llama SCHADE, el órgano del tejido conectivo coloidal. No se da ningún intercambio de fluidos entre la sangre y las células del parénquima a menos que pase a través de este órgano del tejido conectivo. Este órgano conecta y mantiene todo en el cuerpo en su sitio. Este órgano está compuesto por ligamentos, tendones, nervios, y fibras más finas que se convierten en el andamiaje que mantiene cada una de las células de nuestro organismo en su lugar. Cuando se almacenan ácidos en este órgano, que incluye los músculos, aparecen la inflamación y el dolor. La producción de ácido láctico aumenta al ingerir leche, queso, yogurt, mantequilla y especialmente helado.
Esta es la razón por la que afirmo que “el ácido es igual a dolor y el dolor es ácido.”No puedes tener el uno sin el otro. Es el comienzo de la acidosis tisular latente que conduce a la irritación, inflamación y degeneración de las células, tejidos y órganos.
Cuanta más acidez se genere tras comer carne, queso, leche o helados, más ácidos gastrointestinales serán absorbidos por estas fibras de colágeno para ser neutralizados y menos bicarbonato de sodio o NaHCO3 será captado por las glándulas alcalinizantes. Cuanto mayor sea la diferencia potencial entre los ácidos absorbidos y la cantidad de NaHCO3 generado tras cada comida, las glándulas alcalinizantes como el páncreas, la vesícula biliar, glándulas pilóricas, sangre, etc., serán más o menos alcalinos. El poder de fijación de ácidos del tejido conectivo, la sangre y las glándulas alcalinizantes dependerá de sus reservas alcalinas, que pueden ser determinadas a través del pH de la sangre, la orina y la saliva, incluyendo el análisis de sangre viva y seca tal como ha enseñado el Dr. Robert O. Young. El pH de la saliva nos indica las reservas alcalinas en las glándulas alcalinizantes y el pH de la orina es una indicación del pH de los fluidos que rodean las células o el espacio del Pishinger.
La isoestructura de la sangre mantiene su pH vertiendo ácidos gastrointestinales o metabólicos en el tejido conectivo o el espacio de Pishinger. La sangre provee a la orina de la misma cantidad de ácido que recibe de los tejidos y del hígado para poder preservar su isoforma. Una deficiencia en bases siempre está relacionada con el deterioro de la capacidad de almacenamiento de los tejidos conectivos o el espacio de Pishinger. Mientras se mantenga la isoestructura de la sangre, la orina – que se origina de la sangre – será un fiel reflejo de la regulación acido/base, no en sangre, sino en los tejidos. Así que cuando estás testando el pH de la orina, estás testando el pH de los tejidos.
La “acidosis” latente es la condición que existe cuando no hay suficientes bases en las glándulas alcalinizantes, al haber sido utilizadas durante el proceso de neutralización de ácidos. Estas bases son absorbidas por las fibras de colágeno. Ello conduce a una acidosis “compensada.” Lo que significa que el pH de la sangre no ha variado, sin embargo, sí han cambiado otros sistemas del cuerpo. Por lo tanto, esto puede conducir a una “acidosis” descompensada en donde las reservas alcalinas de la sangre son empleadas y el pH de la sangre se ve alterado. La “acidosis” descompensada se puede determinar testando el pH en sangre, el pH en orina y saliva. La disminución de reservas alcalinas en el cuerpo ocurre a causa de una súper proteinización, (comiendo carne y queso), o por demasiada proteína, o por una hipercarbonización, o demasiado azúcar. Esta es la razón del por qué la gente de 80 o 90 años está toda encogida y parecen como pasas. Tienen muy pocas o casi ningunas reservas alcalinas en sus glándulas alcalinizantes. Cuando ya no hay minerales alcalinizantes, tanto tú como tu batería se agotan.
Si no quedan suficientes bases después de haber comido carne, queso o alimentos ricos en azúcar, o suficientes bases para neutralizar y eliminar los ácidos almacenados en el tejido conectivo, comienza a desarrollarse una relativa deficiencia en bases que conduce a una acidosis latente tisular. Cuando esto ocurre tanto el hígado como el páncreas tienen deficiencia de jugos alcalinizantes para asegurar la correcta alcalinización de los alimentos en tu estómago e intestino delgado.
Por lo tanto el estómago NO es un órgano para la digestión tal como se enseña actualmente en TODOS los textos médicos y de biología, sino un órgano de contribución o de depósito. Su función es depositar jugos alcalinos en el estómago para alcalinizar los alimentos y la sangre que los transporta a las glándulas alcalinizantes.
Existe un ritmo diario en las fluctuaciones de los fluidos corporales. Los ácidos almacenados son movilizados del tejido conectivo y los espacios de Pishiger mientras dormimos.
Estos ácidos alcanzan su máxima concentración (marea base) en este fluido, y por lo tanto la orina, hacia las 2 de la madrugada (es cuando está más ácida). El contenido ácido de la orina refleja directamente el contenido ácido del fluido en los espacios de Pishinger, el fluido de los compartimentos extracelulares del cuerpo. Por otro lado, los espacios de Pishinger se vuelven alcalinos al máximo alrededor de las dos de la tarde (inundación base) ya que es entonces cuando se genera más bicarbonato sódico (NaHCO3) en las células parietales del estómago para alcalinizar la comida y bebida que hemos ingerido.
Si tu orina no está alcalina a las dos de la tarde definitivamente te hallas en un estado ACIDIFICADO y con falta de reservas alcalinas. El pH de la orina debiera estar entre 6´8 y 8´4, aunque el ideal es de 7´2 o más.
Después de haber ingerido una comida rica en proteínas como la carne o el queso, los ácidos libres que se forman como los ácidos: sulfúrico, fosfórico, úrico y nítrico se enganchan a las fibras de colágeno para ser eliminados de la sangre y proteger el delicado pH de la misma y mantenerla a 7´365. Los iones de H+ o protones de estos ácidos son neutralizados por la siguiente marea base, el bicarbonato sódico producido después de la comida. El ion de H+ o protón se combina con el carbonato o HCO3 convirtiéndose en ácido carbónico, H2CO3, transformándose en CO2 y H2O. El ácido sulfúrico y otros ácidos provenientes de las proteínas se neutralizan como sigue; dónde el HR representa a cualquier ácido con la R como su radical ácido (SO4, PO4, o NO3) HR+NaHCO3 <=> H2O + NaR (Ca, Mg, K) + CO2.
A los doctores en medicina y sabios eruditos no se lo enseñan en la facultad de medicina y por esta razón no comprenden o reconocen la acidosis latente tisular. Ellos sí entienden y reconocen la acidosis compensada y acidosis descompensada. En la acidosis compensada la frecuencia respiratoria aumenta para poder exhalar más ácido carbónico y disminuir el PCO2, ya que el carbonato o HCO3 ha descendido. Cuando la frecuencia respiratoria ya no puede aumentar más y los riñones ya no pueden continuar soportando el ritmo de la carga ácida, el pH en sangre comienza entonces a cambiar de 7´365 a 7´3 y luego a 7´2. Con un pH en sangre de 6´95 el corazón comienza a relajarse y el paciente entra en coma o fallece.
El metabolismo resultante de la dieta de un adulto normal da lugar a la creación de 50 a 100 meq de iones de H+ o protones por día, los cuales deben ser excretados para poder mantener el equilibrio acido/base de la orina. Un meq es un mili equivalente que expresa la concentración de sustancia por litro de solución, que se calcula al dividir la concentración en miligramos por 100 mililitros por el peso molecular. Este proceso involucra dos pasos básicos; 1) la reabsorción del bicarbonato sódico filtrado o NaHCO3 y, 2) la excreción de los 50 a 100 meq o iones de H+ producidos por día formados por el total de ácido y NH4+ o amonio. Ambos pasos involucran la secreción de iones de H+ o protones de las células renales a la orina.
El bicarbonato sódico (NaHCO3) debe ser reabsorbido por el torrente sanguíneo, ya que la perdida de NaHCO3 aumentará la red de carga ácida y disminuirá la concentración de NaHCO3 en plasma. La perdida de NaHCO3 en orina es equivalente a la incorporación de iones de H+ (hidrogeniones) al cuerpo ya que ambos derivan de la separación del ácido carbónico o H2CO3.
La bioquímica es: CO2 + H2O = H2CO3 = HCO3 + H +. Un individuo normal debería reabsorber 4.300 meq de NaHCO3 cada día. Los iones de H+ o protones (hidrogeniones) secretados se generan en las células renales por la división del H2O o agua. Este proceso también da lugar a la producción equimolar de OH- o iones de hidroxilos. Los iones de OH- se unen al zinc activo contenido en la anhidrasa carbónica intracelular; combinan entonces con el CO2 para formar iones de HCO3- que son llevados de nuevo a las células renales y devueltas a la circulación sistémica. Segundo, la carga ácida dietética es excretada por la secreción de iones de H+ o protones (hidrogeniones) en las células renales y expulsadas por la orina. Estos iones de H+ (hidrogeniones) o protones pueden hacer una o dos cosas; los iones de H+ o protones pueden combinarse con los amortiguadores urinarios, en concreto con el HPO4, en un proceso llamado acidez titulable (la bioquímica es; H+ + HPO4 = H2PO4), o con el sistema de taponamiento del fosfato, o los iones de H+ (hidrogeniones) o protones pueden combinarse con amoniaco (NH3) para formar amonio tal como sigue; NH3 + H+ = NH4
Este amoniaco queda atrapado y concentrado en los riñones en forma de amonio siendo luego expulsado a través de la orina.
Como respuesta a esta carga ácida, el 36% de los hidrogeniones o protones van al espacio intracelular a cambio de la liberación de Na+ (sodio) en el torrente sanguíneo. El 15% del ácido va al espacio intracelular para intercambiarse con el K+ (potasio) – muy común en la diabetes. El 6% de los hidrogeniones o protones o ácido penetran directamente dentro de la célula para ser amortiguados por procesos intracelulares. El 43% es amortiguado extracelularmente como NaHCO3 o bicarbonato sódico combinado con H+ o protones para formar H2CO3 o ácido carbónico que se descompone hasta convertirse en CO2 o dióxido de carbono para poder ser excretado por los pulmones. Un 10% del CO2 es excretado a través de los pulmones y el 90% es usado por el propio cuerpo para reabsorber minerales alcalinos y fabricar bicarbonato sódico para taponar los ácidos gastrointestinales y metabólicos.
La bioquímica es; CO2 + H2O = H2CO3 = HCO3 + H+
24) De todas las formas en que el cuerpo puede amortiguar los ácidos metabólicos y dietéticos, la excreción de residuos ácidos generados por la ingesta de proteínas (carne y queso) es el único proceso que no devuelve el bicarbonato sódico a la circulación sanguínea. Esto genera una pérdida de bases que es el predecesor de todas las enfermedades y achaques.
A largo plazo la única manera de reemplazar estas bases perdidas es comiendo más alimentos verdes alcalinos ricos en electrones y grasas poliinsaturadas de cadena larga. Ingerir carne y queso (lácteos) definitivamente es nocivo para tu salud. Esto es la razón por la que siempre digo, “un pepino al día mantiene alejado la medico mientras que comer carne, queso e incluso manzanas genera aún más exceso de ácido en el tejido conectivo coloidal, conduciendo a la acidosis latente tisular”.Después de más de 30 años de investigación y testando más de 500.000 muestras de sangre y alrededor de 1.000.000 muestras de orina y saliva he llegado a la conclusión de que el cuerpo humano es un organismo cuyas funciones son acidificantes, sin embargo es un organismo alcalino por diseño. Ingerir proteínas de origen animal, especialmente carne, queso y azúcar de cualquier fuente es una elección acidificante mortal, a menos que estés interesado en enfermar, no tener energía, y engordar con el tiempo. Conclusión: El estilo de vida y dieta del pH es un programa enfocado en el fundamento principal de que el cuerpo es alcalino por diseño y sin embargo, todas sus funciones metabólicas son acidificantes. Esto hace que este programa sea el programa definitivo para prevenir y revertir el envejecimiento y el comienzo de las enfermedades y achaques. Yo diría que el estilo de vida y dieta del milagro del pH es la dieta para disfrutar de una vida más larga y más saludable. Y por favor recuerda esta importante verdad, el ácido clorhídrico no es el causante de la digestión en el estomago, sino el resultado de la digestión. Comienza a alcalinizarte hoy y empieza a mejorar tu calidad y cantidad de vida hoy.
- Hits: 277