SANTO DOMINGO. Miembros del colectivo dominicano Marcha Verde protestaron este martes frente a las oficinas de la empresa brasileña Odebrecht.

Marcha Verde, que surgió después que Odebrecht admitió haber pagado 92 millones de dólares en concepto de sobornos, delito por el que hay 14 imputados en el país, anunció que el 20 de agosto marchará hacia la central termoeléctrica que construye la empresa en el país.

Los activistas de los municipios de Baní, Nizao y Matanzas, así como los distritos municipales de Catalina, Paya, Carretón, Santana, Pizarrete, Las Barias, el Limonal, Villa Sombrero, Villa Fundación y Sabana Buey, anunciaron que se concentrarán desde las 9:00 de la mañana en el parque central de Baní, para recorrer varios de los barrios populosos de la ciudad y luego tomar la carretera Sánchez hasta concluir en la parte frontal del cuerpo del delito, en Punta Catalina.

El objetivo de la manifestación es demandar que Odebrecht sea expulsada de República Dominicana; que sus ejecutivos y sus cómplices sean enjuiciados; que se evite la contaminación ambiental propia de la generación a carbón; que se cumpla con los reclamos nacionales de la Marcha Verde de cancelación de los contratos dolosos; la recuperación del dinero obtenido producto de las sobrevaluaciones, sobornos y financiación política ilegal; así como la realización de auditorías e investigaciones independientes.

“El pueblo dominicano no está obligado a mantener ni aceptar un contrato con una empresa que ha admitido que ha robado el dinero de la población pobre para enriquecer a políticos y empresarios corruptos. Si el presidente Danilo Medina no puede romper con Odebrecht, ese es su problema, pero no tiene derecho constitucional arrastrar al pueblo a su lodazal”, afirmaron mediante rueda de prensa realizada frente a las oficinas de Odebrecht, en el sector La Esperilla del Distrito Nacional.