En su homilía, afirma que la Virgen de la Altagracia, como protectora del pueblo, también quiere que haya igualdad.

El obispo de la arquidiócesis de la Altagracia, Monseñor Nicanor Peña Rodríguez, dijo ayer que Dios ni María quieren que en el pueblo dominicano haya diferencias y desigualdades sociales.Peña Rodríguez recordó que Dios quiere que sus hijos sean libres, y que por eso envió a Jesús, su único hijo, nacido del vientre de María bajo la ley de los hombres, para que libere a los que sufren y son oprimidos por la misma ley.

El obispo de La Altagracia recordó que como protectora del pueblo dominicano el deseo de María es la igualdad entre todos sus hijos.

Nicanor Peña Rodríguez se expresó en esos términos durante la homilía con motivo de celebrarse ayer el Día de Nuestra Señora de La Altagracia, durante la cual estuvo presente el presidente de la República, Danilo Medina; su esposa Cándida Montilla de Medina, el senador de la provincia La Altagracias, Amable Aristy Castro, y el jefe la Policía Nacional, mayor general Manuel Castro Castillo.

También el presidente ad vitam del Banco Popular, Alejandro Grullón; el empresario turístico Frank Rainieri, el embajador ante el Vaticano, Víctor Grimaldi, el aspirante presidencial Luis Abinader y la miss Universo República Dominicana, Kimberly Castillo.

Peña Rodríguez también recordó que la Virgen María fue declarada protectora del pueblo dominicano el 15 de agosto de 1922, en un acto solemne celebrado en la Puerta del Conde, en la ciudad de Santo Domingo.

El 15 de agosto de tres siglos atrás fue que los hermanos Alonso y José Trejo trajeron el cuadro de la Virgen María desde Extremadura, España, donde la advocación a la madre de Jesús era una tradición.

“No podemos decir que María es nuestra protectora si no estamos dispuestos a colaborar con el plan de Dios que quiere que entre los dominicanos haya mejor distribución de los bienes, para que no haya tantas desigualdades y exclusiones”, apuntó Nicanor Peña Rodríguez.

Dijo que el tener a María como protectora “nos obliga a colaborar con Dios para que el país realice el plan de salvación todos los días; nos invita a obedecerle con nuestras obras, y a construir una sociedad nueva en la que todos los munícipes, dominicanos y dominicanas, puedan vivir una vida digna”.

Luego de la misa celebrada la basílica catedral abarrotada de feligreses, el obispo Peña Rodríguez ofreció un almuerzo en su residencia al presidente Danilo Medina y a otras personalidades presentes.

Los actos

La misa a la que asistió el presidente Medina fue solo la principal de las 5 que ayer se celebraron en la basílica: una a las 5:39 de la mañana, celebrada por monseñor Pablo Cedano, Obispo Emérito de Santo Domingo; a las 10:00 la Misa Solemne, presidida por monseñor Nicanor Peña Rodríguez; a las 12:30, oficiada por el padre Álvaro Merino Lera; a las 1:30 misa en creole; y a las 4:30 una solemne procesión por las calles de Higüey, encabezada por Peña Rodríguez.

Igualmente, en la parroquia San Dionisio hubo celebraciones similares, mientras cientos de feligreses acudían a ver el Naranjo donde, cuenta la tradición, María se le apareció a una niña, la cual le pidió a su padre, que viajaría al pueblo en esos día, que le trajera de regalo un cuadro de la madre de Jesús.

Tras la misa cientos de feligreses de todo el país continuaron haciendo largas filas para poder penetrar hasta la basílica y tocar el cuadro de María

Testimonios

Mientras esto sucedía, otros cristianos católicos, devotos de la Virgen María, contaban los milagros que la madre de Jesús de Nazaret había realizado en su favor para cambiarle la vida para siempre. David, un hombre de alrededor de 30 años, contó que perdió la visión luego de caerse en una calle del centro de la ciudad capital. Tras un año y siete meses sin ver, y ya cuando los médicos se rindieron al no poder salvarle la visión, él fue llevado por su madre y su hermano a la basílica. “Oramos y le pedí que me devolviera mi vista, pues sin ver era un ser inservible, y a los dos meses una mañana cuando me desperté ya veía, borroso, y a la semana veía completamente: todos los días le pedía a María que me devolviera mi vista”, cuenta.

Historia similar estuvo contando Elizabeth, de tan solo 23 años. Ella dijo que a su corta edad le diagnosticaron cáncer de mama. La noticia la devastó, igual que a toda su familia. Su madre, cristiana que jamás fue devota de María, en su desesperación llevó a Elizabeth a Higüey y juntas lloraron ante la imagen. Al cabo de 4 meses, extrañamente, los médicos del Instituto Oncológico Dr. Eriberto Pieter se asombraban porque en su cuerpo no había vestigio de carcinoma alguno.

López Rodríguez oficia misa en la Catedral

Al oficiar una misa en la Catedral Primada de América, el Cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez pidió a la Virgen de La Altagracia que interceda por el pueblo dominicano.

López Rodríguez ofició una de las eucaristías realizadas ayer en el Distrito Nacional, al celebrarse el Día de La Altagracia. En tanto, al obispo Víctor Masalles le correspondió encabezar una misa en la iglesia Nuestra Señora de la Altagracia. En su mensaje, Masalles llamó a la población a buscar siempre la protección de la Virgen y del Señor Jesucristo.

Fuente: http://www.elcaribe.com.do/2015/01/22/obispo-higuey-dice-dios-quiere-desigualdades#sthash.NjuKY2CE.dpuf