Néstor Medrano

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Santo Domingo

El cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez pidió a los aspirantes a la Presidencia de la República una campaña de altura, con dignidad y evitando la violencia y la campaña sucia y que cada uno se limite a decir qué es lo que va a hacer en caso de ser favorecido con el voto popular el próximo 20 de mayo.

 

“Evitemos confrontaciones y disgustos y ojalá que las cosas que se vayan presentando sean solucionadas de manera satisfactoria. Es lo que deseamos todos los dominicanos de buena voluntad”, significó

El arzobispo de Santo Domingo habló con los periodistas al término de la Misa de Acción de Gracias por el Año Nuevo, que tuvo lugar en la Catedral Primada de América, en la cual estuvo presente el vicepresidente de la República Rafael Alburquerque, los embajadores de Estados Unidos Raúl Yzaguirre y Fritz Cineas, de Haití.

Feminicidio López Rodríguez proclamó además que no acaba de entender cómo es posible que se hayan registrado tantos crímenes en contra de mujeres, “sobre todo pasionales, pero cuando un hombre y una mujer no pueden convivir, que se separen, que dejen eso”.

Dijo que el tema de esos asesinatos lastima e hiere en lo más sensible a la sociedad y al alma y al corazón de los dominicanos.

“Por consiguiente hay que tratar de ver cómo todo esto se evita”, añadió. Indicó que por el otro lado está “el problema gravísimo del narcotráfico”.

Sobre el narcotráfico dijo que aunque cree que en el país se están dando algunos golpes certeros, hay evidencias “de que el país está siendo pretendido como punto de referencia, tanto desde Suramérica como con Puerto Rico para distribución y también transporte”.

EXPECTATIVAS PARA DOMINICANOS

MEJORES CONDICIONES DE VIDA PARA TODOS

El cardenal López Rodríguez dijo que espera que se cumplan las expectativas de un año mejor para los dominicanos, un año de realizaciones, “un año en que todos podamos vivir en mejores condiciones de vida, porque esa es una aspiración muy legítima de cualquier ser humano”.

En la misa también participaron el nuncio apostólico de Su Santidad en República Dominicana, monseñor Jozef Wesolowski, y monseñor Agripino Núñez Collado. A la misa asistieron el Vicepresidente Rafael Alburquerque y varios ministros.