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Written by Emilio Fernandez on . Posted in Internacionales.

Diez cosas que no sabías de la gripe.

Solo en España, la gripe afecta a entre 400.000 y un millón de personas; cada año causa de 250.000 a 500.000 muertes en el mundo.

Los científicos aún no saben cómo erradicar el virus que produce la gripe. No obstante, es posible burlarlo a través de la vacunación. A continuación hemos seleccionado diez curiosidades relacionadas con esta enfermedad infecciosa:

1. Compañía non grata

Si dibujáramos el virus que provoca la gripe, esbozaríamos un sol. "Los rayos serían sus proteínas más importantes, la hemaglutinina y la neuraminidasa, que forman espículas insertadas en su superficie esférica", detalla María Ángeles Marcos, jefa de Virología del Hospital Clínic de Barcelona. En las zonas tropicales campa a sus anchas todo el año, pero en nuestra latitud su temporada alta llega con el frío. Este patógeno va cambiando, de ahí que de un año a otro la vacuna deba ser actualizada y tengamos que pincharnos de nuevo. "No se puede erradicar, pero sí controlarse mejor", asegura Marcos.

2. Aprende a toser

El virus se transmite por vía aérea, por eso "aunque es muy contagioso, medidas como el lavado de manos o cubrir la boca al estornudar y toser son muy eficientes", aclara Marcos. No es algo banal, pues un estudio de la Universidad Victoria de Wellington, en Nueva Zelanda, llevado a cabo en la pandemia de 2009 reveló que solo el 4,7 % de las personas que tosían o estornudaban en lugares públicos lo hacían de manera correcta, es decir, tapándose la boca con una tela, un pañuelo o el propio brazo.

3. Un okupa sin ganas de irse

Una vez en las vías respiratorias, el virus secuestra la maquinaria de la célula para multiplicarse. "La cantidad de virus que salen de una sola para infectar otras es incalculable", apunta Marcos. A diferencia del resfriado, la gripe dura más –siete días– y produce fiebre, dolor muscular, tos y cansancio. Los antivirales se toman en las primeras 48 horas tras el inicio de los síntomas, pero solo se dan a pacientes con otras dolencias. "La persona con un sistema inmunológico sano precisa tratamiento sintomático y mucha paciencia", aconseja la doctora.

4. El origen de las pandemias constituye un enigma

Cada cepa nueva que ha logrado transmitirse entre personas ha infectado a un cuarto o más de la población mundial en menos de dos años. En el siglo XX ha habido cuatro pandemias y su origen sigue siendo un misterio. La explicación más aceptada es que los virus tienen su reservorio en aves acuáticas salvajes y de ellas se diseminan a otras especies. Hipótesis más controvertidas apuntan a que algunas personas podrían ser portadoras asintomáticas y un foco de infección potencial o que en las capas altas de la atmósfera residen agentes virales que bajan a la superficie arrastrados por cometas o corrientes de aire.

5. Un pinchazo al año, lo mejor que tenemos

Los científicos llevan décadas persiguiendo una vacuna universal contra la infección, es decir, un único pinchazo que nos proteja de por vida. Sin embargo, el reto se resiste. "El problema es que este tratamiento debe basarse en alguna proteína común en los dos tipos de gripe que afectan a humanos, el A y el B, y en todos sus subtipos, y resulta difícil encontrar la molécula adecuada", explica Ernest Milián, quien investiga nuevos métodos de fabricación de vacunas en el Consejo de Investigación Nacional de Canadá. Además, la eficacia de la inmunización que usamos ahora no es altísima, pues se estima que protege a un 60 % de los vacunados. De todos modos, y según asegura Marcos, "es la mejor herramienta que tenemos".

6. Tu hijo es un supercontagiador

Los especialistas se plantean ahora un nuevo reto: reducir la transmisión del virus vacunando a los supercontagiadores. Una investigación de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres demuestra que extender la inmunización en los niños es una de las estrategias más eficientes para poner coto a la enfermedad, pues la transmisión de la infección a través de ellos es exponencial. No obstante, eso no quiere decir que deje de vacunarse al resto de la población de riesgo. Para ahorrarse complicaciones derivadas de la gripe, deben hacerlo las embarazadas, las personas con enfermedades crónicas, cáncer, sida u otros problemas de salud, y los mayores de 65 años.

7. Inmunizados por un huevo

Las farmacéuticas fabrican centenares de millones de vacunas cada temporada, y lo hacen con la misma tecnología que en 1940: huevos de gallina. Para obtener el antígeno, el virus tiene que crecer a gran escala en un medio con células vivas, pero "uno de los problemas es que cada huevo genera una dosis, y en caso de pandemia sería imposible proteger a toda la población. Además, si el origen del microbio fuera aviar, el abastecimiento de huevos podría caer en picado", explica Milián. Una manera innovadora de elaborarlas es mediante el cultivo de células de insecto o de mamífero. Este método es "más rápido y barato", aclara el investigador.

8. Datos en tiempo real para proteger a la población

"Cuando se forma un huracán necesitas saber donde está su ojo para predecir cuándo, dónde y con qué intensidad tocará tierra", explica Yamir Moreno, investigador de la iniciativa GripeNet.es. Con este virus que nos visita en invierno se hace lo mismo. "Utilizamos datos de miles de voluntarios que nos informan de su salud y predecimos la trayectoria de la infección para tomar medidas", añade Moreno. Este sistema, diseñado en la Universidad de Zaragoza, cuenta con la participación de unos mil españoles y es uno de tantos en el mundo que buscan adelantarse al curso de las enfermedades infecciosas para paliar sus efectos.

9. Internet nos echa una mano

Al batallón de médicos centinelas que vigilan la enfermedad se les ha sumado ahora un gran aliado: la Red. La revista científica PNAS publicaba el año pasado un nuevo modelo llamado ARGO (por las siglas en inglés de 'autorregresión con Google') que logra predecir los brotes de gripe una o dos semanas antes que los métodos que se usaban hasta ahora. Lo hace combinando la información epidemiológica tradicional con las búsquedas de los usuarios en internet. Representa una de las utilidades del big data sanitario, "aunque todavía estamos trabajando en cómo integrar los datos que ofrecen las nuevas tecnologías en nuestros modelos. Por ejemplo, sabemos que las búsquedas en línea pueden dar falsos positivos mientras que las redes sociales parecen más fiables", explica Moreno.

10. Cómo conocer mejor las tripas de los virus

Los científicos que investigan la gripe están divididos en dos bandos y no pueden verse entre ellos. Los que pertenecen a Scientists for Science (Científicos para la Ciencia) buscan generar nuevos patógenos en el laboratorio que sean especialmente letales y contagiosos. Según ellos, estos experimentos podrían generar un conocimiento precioso para mejorar las vacunas. Por el contrario, los investigadores del Cambridge Working Group (Grupo de Trabajo de Cambridge) temen que alguno de estos virus se escape del laboratorio y cause una pandemia, por lo que han peleado hasta conseguir que en Estados Unidos se detengan temporalmente estos ensayos.

Fuente: http://www.muyinteresante.es/salud/articulo/diez-cosas-que-no-sabias-de-la-gripe-511482134193